Viernes 24 de Mayo 2024
VIIa Semana Ordinaria B
Nuestra Señora Auxiliadora
Textos Bíblicos: L1 St 5,9-19; Sal 102
+Lectura del santo evangelio según san Marcos 10,1-12
En aquel tiempo, Jesús se marchó a Judea y a Transjordania; otra vez se le fue reuniendo gente por el camino, y según costumbre les enseñaba. Se acercaron unos fariseos y le preguntaron para ponerlo a prueba: ¿Le es lícito a un hombre divorciarse de su mujer? Él les replicó: ¿Qué os ha mandado Moisés? Contestaron: Moisés permitió divorciarse, dándole a la mujer un acta de repudio. Jesús les dijo: Por vuestra terquedad dejó escrito Moisés este precepto. Al principio de la creación Dios los creó hombre y mujer. Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y serán los dos una sola carne. De modo que ya no son dos, sino una sola carne. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre. En casa, los discípulos volvieron a preguntarle sobre lo mismo. Él les dijo: Si uno se divorcía de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra la primera. Y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio.
Reflexiones. –
En este Evangelio Jesús habla muy seguro de la enseñanza y de una forma muy clara. El enfoque principal está en que si es permitido divorciarse para casarse con alguien más. Para esto, tomaremos 3 enseñanzas que serán claves para desarrollar la meditación.
1) Jesucristo siempre está dispuesto a enseñar la verdad, al igual que Él nosotros debemos enseñar la verdad aunque a algunos no les guste.
2) Nos recuerda el origen de la humanidad. «Desde el principio, al crearlos, Dios los hizo hombre y mujer» Esta es la naturaleza del hombre que es creación de Dios.
3) Nos invita a vivir según la Voluntad de Dios.
Con estas 3 ideas, retomamos la reflexión. Quien tenga la vocación al matrimonio, debe entender, que tiene que buscar la Gracia de Dios a través del Sacramento del matrimonio para toda la vida. Esto del matrimonio para toda la vida se puede lograr solamente si Dios está presente en la pareja todos los días.
Recordemos que lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre. No debemos de actuar contra el plan de Dios para la vida de los demás. Jesús enseñó con autoridad a los Fariseos que no está permitido el divorciarse luego del matrimonio, y en privado se lo confirmó a los discípulos. No dejemos que la dureza de nuestros corazones nos lleve a actuar en contra de la Voluntad de Dios. Que descubrimos siempre a María como Auxiliadora en los tiempos difíciles y en nuestra vida.
ORACIÓN: Señor, ayúdame a buscarte a Ti coma María, que eres la Verdad. A encontrar mi vocación.
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