Miércoles 29 de Mayo 2024
VIIIa Semana Ordinaria B
Textos Bíblicos: L1 1Pe 1,18-25; Sal 147
+Lectura del santo evangelio según san Marcos 10,32-45
En aquel tiempo Jesús tomó aparte otra vez a los Doce y se puso a decirles lo que le iba a suceder: Mirad, estamos subiendo a Jerusalén, y el Hijo del Hombre va a ser entregado a los sumos sacerdotes y a los letrados, lo condenarán a muerte y lo entregarán a los gentiles, se burlarán de él, le escupirán, lo azotarán y lo matarán; y a los tres días resucitará. Se le acercaron los hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, y le dijeron: Maestro, queremos que hagas lo que te vamos a pedir. Les preguntó: ¿Qué queréis que haga por vosotros? Contestaron: Concédenos sentarnos en tu gloria uno a tu derecha y otro a tu izquierda. Jesús replicó: No sabéis lo que pedís, ¿sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber, o de bautizaros con el bautismo con que yo me voy a bautizar? Contestaron: Lo somos. Jesús les dijo: El cáliz que yo voy a beber lo beberéis, y os bautizaréis con el bautismo con que yo me voy a bautizar, pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo; está ya reservado. Los otros diez, al oír aquello, se indignaron contra Santiago y Juan. Jesús, reuniéndolos, les dijo: Sabéis que los que son reconocidos como jefes de los pueblos los tiranizan, y que los grandes los oprimen. Vosotros, nada de eso: el que quiera ser grande, sea vuestro servidor; y el que quiera ser primero, sea esclavo de todos.
Reflexiones. –
Estamos subiendo a Jerusalén. Seguir al Señor se le ha llamado "el camino" y es que la vida de Jesús nos la presentan los evangelistas como una subida a Jerusalén y de Jerusalén al cielo. Toda subida es difícil. Pero si esa subida es a Jerusalén lleva consigo la pasión. Los discípulos quieren puestos de preferencia y honor, Jesús les habla de la pasión: lo condenarán a muerte y lo entregarán a los gentiles, se burlarán de él, le escupirán, lo azotarán y lo matarán. Es el amargo cáliz que le toca beber. A lo que los discípulos también, sin saber a lo que se comprometen, dicen que están dispuestos a beber. Compartir el cáliz del Señor es ya un privilegio y una recompensa.
Jesús se dirige a su pasión voluntariamente. Es un paso hacia la vida. La finalidad es la resurrección. Jesús trata de explicar a sus discípulos que el camino de la gloria es la pasión. Usa dos símbolos: el cáliz, imagen de algo difícil de tragar y el bautismo, imagen de la inmersión con su riesgo.
Jesús contrapone la comunidad de fe a la comunidad civil. Los políticos se sienten jefes, dominan con dureza y hacen sentir el peso de su autoridad. En la comunidad de fe, los "jefes" tendrán la tarea de servir. Por eso es un gravísimo pecado organizarse a imagen del Estado: el Hijo del hombre no ha venido para ser servido sino para servir y dar su vida en rescate por todos (Mc10, 42-45). Rescate era el precio de liberar a un prisionero o a un esclavo.
ORACIÓN: Señor, gracias por mi rescate, puedo amar.
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