Lunes 04 de Noviembre 2024
XXXIa Semana Ordinaria B
San Carlos Borromeo, Obispo
+Lectura del santo evangelio según San Lucas (14,12-14)
En aquel tiempo, dijo Jesús a uno de los principales fariseos que lo había invitado: «Cuando des una comida o una cena, no invites a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a los vecinos ricos; porque corresponderán invitándote, y quedarás pagado. Cuando des un banquete, invita a pobres, lisiados, cojos y ciegos; dichoso tú, porque no pueden pagarte; te pagarán cuando resuciten los justos.»
Reflexión:
Jesús aprovecha otra invitación, para seguir aconsejando, evangelizando. En este caso a un "importante fariseo". Que lección más bonita!. Es la invitación a no dar a los que ya tienen o a los que nos une alguna atracción ordinaria, de amistad, familiaridad, cercanía o compromiso, sino a los que más lo necesitan o tienen alguna discapacidad y, por más que quieran, no podrán pagarte o devolverte el favor. Entonces serás dichoso, porque tu paga no será en la tierra sino en la resurrección.
Cuando ayudas a alguien que lo necesita encarecidamente y que ni siquiera lo esperaba de ti, que gozo sienten ambos!. Es cuando en verdad experimentamos que el Reino de Dios está entre nosotros y cuando descubrimos que en verdad hay más dicha en dar que en recibir.
Este modo cercano, amigable y estos consejos de Jesús son como chispas que van por los caminos encendiendo corazones y esparciendo por el mundo el amor y la felicidad del Reino.
ORACIÓN: "No te importe la raza ni el color de la piel; ama a todos como hermanos y haz el bien".